La semana pasada el Estadio Ricardo Saprissa Aymá celebró 52 años de existencia, tras su inauguración el 27 de agosto de 1972 con duelo entre el cuadro morado y el Comunicaciones chapín.
El recinto deportivo evoca gratos recuerdos no solamente para la institución tibaseña, sino también para la afición nacional en general, pues a lo largo de los años se ha convertido en escenario de jornadas futbolísticas tanto nacionales como internacionales, en cuenta por supuesto las contiendas de nuestra Selección Nacional, la cual incluso ha celebrado allí dos clasificaciones mundialistas.
Entonces, para traer a colación el tema de los ‘legionarios’ costarricenses, materia a la que se refiere este espacio, quise compartir con el estimable lector de everardoherrera.com, el caso del primer legionario tico que jugó en el Ricardo Saprissa. Se trata de un futbolista nacional que tenía ya 15 años de actuar en nuestra primera división, y al asumir su primera experiencia como jugador de un club extranjero, se presentó en el reducto morado en una época en que en el resto del istmo se le empezaba a profesar admiración y respeto…
Para 1975 Walter Elizondo Gómez tenía un nombre bien ganado en el balompié centroamericano. De cuna morada, había comandado las respectivas zagas del Deportivo Saprissa, Orión FC y LD Alajuelense, además de capitanear a ‘la Sele’. Los Pumas de la UNAM y una selección centroamericana para un torneo en Brasil, habían andado detrás de sus servicios en el pasado reciente, lo que demuestra lo bien valorado que era el nacido en el Carmen de Cartago.
En aquel momento Elizondo tenía 32 años de edad, y atendiendo una interesante propuesta de unos empresarios turcos radicados en El Salvador, se incorporó al equipo cuscatleco Negocios Internacionales. El club no era otro que el Juventud Olímpica, un elenco histórico en el fútbol salvadoreño, que para la temporada 74-75 tomó el nombre de una empresa distribuidora de productos para supermercados, propiedad de los mencionados turcos; el acrónimo “NEIN” era como más comúnmente se le llamaba al nuevo club del defensor costarricense.
Walter con una nueva camiseta, la primera como legionario. La composición muestra al gran zaguero nacional Walter Elizondo portando las camisetas de tres de los clubes para los que jugó. De izquierda a derecha aparece como futbolista de Saprissa, Alajuelense y Negocios Internacionales de El Salvador. (Fotos Diario Extra, Sol y Sombra, y La Nación)
En esa época existía el campeonato de la Fraternidad Centroamericana, un antecedente de la actual Copa Centroamericana en la que hoy siguen con vida manudos, florenses y morados. Y los seis conjuntos participantes para la edición de 1975 eran los guatemaltecos Municipal y Aurora, los ticos Saprissa y CS Herediano, así como los cuscatlecos Platense y NEIN. Este último equipo, el de Walter, efectuó sus dos primeros compromisos en casa frente a los rojiamarillos (1-1), y en campo chapín ante el Aurora (1-2). Quiso el calendario oficial que como parte de la tercera fecha visitaran el coloso de San Juan de Tibás, donde los iba a recibir un Saprissa que en ese momento sumaba tres de los seis cetros nacionales consecutivos que conseguiría en aquella década.
El domingo 26 de enero de 1975 los morados se impusieron con suma dificultad 2-1, en un partido en el que, de acuerdo a las crónicas de los diarios nacionales, los visitantes exhibieron un mayor dominio que sin embargo terminaría siendo insuficiente para vencer la jerarquía saprissista. Elizondo sobresalió en la zaga del NEIN; una vez tras otra aparecía él con cortes oportunísimos que evitaron goles en la portería de su guardameta Mauricio ‘Tarzán’ Alvarenga (seleccionado cuscatleco), hasta que los tantos de Asdrúbal ‘Yuba’ Paniagua y el brasileño Odir Jacques decidieron el cotejo.
Cierre oportuno. Francisco ‘Chico’ Hernández se aprestaba a fusilar al arquero salvadoreño ‘Tarzán’ Alvarenga, cuando in extremis llegó Walter Elizondo para cortar y enviar el esférico al tiro de esquina. El defensor tico, al servicio del equipo Negocios Internacionales, jugó como legionario en el Ricardo Saprissa en enero de 1975. (Foto La República)
“Walter jugó con buen suceso en el Negocios Internacionales en ese torneo de la Fraternidad. Sin embargo, su equipo no tuvo mejor suerte porque había equipos muy fuertes como el Saprissa, el Herediano, el Aurora… y nosotros con el Platense”, recordó desde El Salvador el periodista y exfutbolista Manuel Cañadas, quien en aquella edición de la Fraternidad Centroamericana actuó para el Platense de su país, cuadro que por cierto se erigió campeón esa vez.
Walter Elizondo falleció en 2018, víctima de alzhéimer. Atrás dejó una gran carrera deportiva en la que recogió múltiples elogios de la afición centroamericana. En su momento enardeció a los fanáticos al pasar de las filas de Saprissa al principal archirrival LD Alajuelense, ganó ocho títulos nacionales, y fue el primero en jugar para los cuatro grandes del país, interesantes hechos a los que hay que añadirle el de haber sido el primer legionario costarricense en pisar la gramilla del Ricardo Saprissa Aymá.
Y para finalizar el presente artículo no quería dejar pasar la ocasión de compartir el dato de que este espacio de legionarios ticos hoy está cumpliendo un año en la página deportiva más reconocida de Costa Rica. Agradezco mucho a don Everardo Herrera Soto por brindarle la oportunidad al autor de estas líneas de describir tantas historias, informaciones y curiosidades alrededor de los casos de nuestros compatriotas que en distintas épocas se aventuraron en el fútbol de otras naciones. Al mismo tiempo, deseo extender mi sincero agradecimiento al estimable y fiel lector; mi retribución hacia él será continuar ofreciéndole el resultado del trabajo investigativo que aquí procuro plasmar… ¡Pura vida!
* El autor es historiador de fútbol costarricense y responsable de la página de Facebook Gol de Camerino; pronto estará publicando el libro Nuestros primeros legionarios. Futbolistas ticos en el mundo 1875-1990.
** Agradecimiento especial a los exfutbolistas salvadoreños don ‘Meme’ Cañadas y don ‘Bocho’ Vásquez por sus aportes para este artículo.
*** Imágenes de portada son tomadas de La Nación y El Mundo.